Si bien la buena gestión de grupos de trabajo es esencial, es necesario un mayor grado de inteligencia emocional para motivar a los equipos. La inteligencia emocional es fundamental para nutrir y motivar a los equipos, y las empresas deben dar prioridad a la salud mental y el bienestar de sus empleados.
La inteligencia emocional es fundamental para nutrir y motivar a los equipos, y las empresas deben dar prioridad a la salud mental y el bienestar de sus empleados, pues aún se encuentran lidiando con el estrés de la nueva normalidad, el aislamiento social asociado con la pandemia y las pérdidas humanas ocasionadas por la misma. Las empresas necesitarán implementar más que programas ampliados de asistencia a los empleados para apoyar a los trabajadores durante este tiempo desafiante. El enfoque en el bienestar debe ir acompañado de un liderazgo empático.
Los lideres deben tener en cuenta que son responsables de crear una cultura empresarial y a su vez enfocarse en los siguientes aspectos:
Ser real
Los líderes deben ser sinceros con lo difíciles que son las cosas, especialmente en el entorno actual, el líder debe compartir sus propias preocupaciones y pensamientos personales, pues en estos momentos, el equipo necesita saber si van en la misma dirección, pues estamos atravesando juntos la misma experiencia.
Tener autoconciencia
Podemos trabajar eficazmente con los demás solo si nos conocemos bien. Para ello, el líder debe dedicar unos minutos cada mañana a escribir sus pensamientos antes de comenzar el día y sintonizarse con sus sentimientos con el fin de identificar si se siente ansioso, preocupado o enojado. Asimismo, debe tratar de comprender cómo lo visualizan sus compañeros para evaluar sus fortalezas y los puntos dónde necesita mejorar. Cuando se domina la autoconciencia, es posible observar sus emociones en lugar de simplemente reaccionar ante ellas.
Ser empático
La empatía tiene varios componentes que incluyen conciencia mental, la comunicación y el Lenguaje físico. Los equipos quieren líderes que los conozcan y se preocupen por ellos como personas, y quieren tener conversaciones sobre la vida fuera del trabajo. Preguntarle a su equipo qué asistencia necesitan puede ser de gran ayuda para que se sientan apoyados.
Tener comunicación efectiva
No comunicarse de manera eficaz en el lugar de trabajo genera frustración y confusión entre los equipos. Los líderes que aprovechan la inteligencia emocional tienen una mayor capacidad para influir, persuadir y conectarse con los demás. La comunicación eficaz puede eliminar obstáculos y fomentar relaciones laborales más sólidas. La comunicación efectiva también resulta en una alineación organizacional y un sentido de propósito compartido.
Estar motivado
Un requisito primordial de los líderes es la capacidad de motivar. Las personas emocionalmente inteligentes comprenden el significado más profundo de sus metas y las habilidades de automotivación necesarias para alcanzarlas. La automotivación se relaciona con el impulso interno. Lo que permite fijar metas claras y mejorar la disposición para actuar sobre las oportunidades que surgen y la capacidad de recuperación.
Al aprovechar el poder de la inteligencia emocional, podrá mejorar la motivación y el compromiso de los equipos, fortalecer la cooperación y aumentar el desempeño. Se el líder que tus compañeros necesitan y toda la organización navegará a tu ritmo.